EE.UU. - El presidente Trump firmó el miércoles una orden ejecutiva que restringe el ingreso de ciertas categorías de inmigrantes a los Estados Unidos, pero la medida contiene amplias excepciones y es más limitada que el amplio cierre que describió a principios de semana.

La orden bloquea la entrada de varias categorías de inmigrantes durante 60 días, pero no se aplicará a los inmigrantes que ya viven y trabajan en los Estados Unidos que buscan convertirse en titulares de la tarjeta verde como residentes legales permanentes.

Los cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes tampoco se verán afectados, pero otros familiares que buscan emigrar serán bloqueados.

"Para proteger a nuestros grandes trabajadores estadounidenses, acabo de firmar una orden ejecutiva que suspende temporalmente la inmigración a los Estados Unidos", dijo Trump en una reunión informativa de la Casa Blanca el miércoles.

"Esto garantizará que los estadounidenses desempleados de todos los orígenes sean los primeros en la fila de empleos a medida que nuestra economía se reabre", continuó Trump. "También preservará nuestros recursos de atención médica para pacientes estadounidenses".

La orden, que se publicó poco después de los comentarios de Trump, se aplica a aquellos que buscan residencia permanente en los Estados Unidos y tendrá una duración de 60 días, momento en el que será reevaluada y potencialmente extendida. Trump dijo el miércoles que podría cambiar el orden durante los 60 días.

La orden se aplicará a los ciudadanos extranjeros que buscan una tarjeta verde que se encuentren fuera de los Estados Unidos en el momento de la orden, excluyendo de la suspensión a aquellos que se encuentran en el país y buscan cambiar su estatus migratorio.

Esa distinción, dicen los abogados, es importante porque una orden que limite las solicitudes de cambio de estatus podría anular la vida de los inmigrantes legales en el país, lo que invita a un litigio extenso.

También establece excepciones para los trabajadores esenciales, incluido el personal médico, cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses, miembros de las Fuerzas Armadas, personas designadas por la policía, posibles adoptados extranjeros de ciudadanos estadounidenses y posibles usuarios de "visa de inversionista". Trump también señaló el martes que la orden no se aplicaría a los trabajadores agrícolas temporales, que buscarían visas de trabajadores temporales.

La orden incluye una disposición para que los secretarios de Trabajo y Seguridad Nacional revisen los programas de visas de no inmigrante en consulta con el secretario de Estado para "recomendarme otras medidas apropiadas para estimular la economía de los Estados Unidos y garantizar la priorización, contratación y empleo de estadounidenses Trabajadores de los Estados ".

Con mucho, la categoría más grande de visas de inmigrantes son las otorgadas a cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses. La categoría de inmigrantes más afectada probablemente serán aquellos que buscan tarjetas verdes a través de sus empleadores o en función de sus méritos profesionales.

"Podría modificarse", dijo Trump a los periodistas el miércoles. "En este momento, tenemos una prohibición de inmigración muy poderosa, pero puede modificarse, lo que significa que se hará más dura o menos dura". 

Trump indicó el miércoles que el objetivo principal de la orden era mitigar el daño económico del coronavirus, que ha obligado a las empresas de todo el país a cerrar y despedir trabajadores. Aproximadamente 22 millones de estadounidenses han solicitado beneficios de desempleo en las últimas cuatro semanas.

El presidente ha prohibido por separado los viajes desde China, Irán y la mayor parte de Europa, además de restringir el tráfico a lo largo de las fronteras con Canadá y México para frenar la propagación de COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, que había enfermado a más de 840,000 Los estadounidenses a partir del miércoles por la noche, según la Universidad Johns Hopkins.

Trump reconoció el miércoles que su administración también está preparando una segunda orden que luego podrá firmar para limitar aún más la inmigración, pero no proporcionó más detalles sobre qué forma tomaría.

Es probable que el orden actual afecte a un grupo relativamente pequeño de personas, dadas las exenciones incluidas.

Los inmigrantes de México, por ejemplo, tienden a obtener sus tarjetas de residencia como familiares de ciudadanos estadounidenses. 

En enero, el último mes antes de que los cierres relacionados con el coronavirus comenzaran a afectar los patrones de migración, el Departamento de Estado otorgó 5.536 tarjetas verdes a los mexicanos. De ellos, casi 3.000 eran cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses.

Los grupos más grandes de ciudadanos mexicanos que habrían caído bajo la suspensión son los hijos y cónyuges de residentes legales permanentes y los padres extranjeros de ciudadanos estadounidenses adultos.