Culiacán, Sinaloa.  Al no estar completos los grupos interdisciplinarios para los retenes de alcoholímetros, da lugar a la corrupción y a que se presenten las violaciones a los derechos humanos de los ciudadanos, expresó el presidente de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Sinaloa, Óscar Loza Ochoa.

De acuerdo con las reformas a la Ley de Tránsito y Transportes del Estado que entraron en vigor en agosto de 2016, los operativos de alcoholimetría en cada punto de revisión deberán contar con la presencia de policías de Tránsito Municipal, así como de un médico que aplique la prueba y un representante del Órgano Interno de Control Municipal, además de un representante de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y uno de la Organización de la Sociedad Civil.

Al respecto el ombudsman advirtió que ninguna de las Comisiones de Derechos Humanos tendrá el personal suficiente para que estén presentes en cada retén y mencionó que el número de puntos de revisión es debido al creciente consumo de bebidas alcohólicas que incluso se vende a menores de edad.

“Si se llega a quejar el ciudadano, será la palabra de uno contra otro , porque no hay quien sancione, observe el actuar de las autoridades” dijo

Oscar Loza indicó que sí se presentan quejas de abusos por parte de la autoridad, pero al no contar con pruebas que confirmen la agresión, son casos que no se investigan, sin embargo, sostuvo que ya se ha comprobado violencia  y agresiones verbales por parte de los policías contra los ciudadanos y conductores.

El pasado sábado en un recorrido de VIVAVOZ por el bulevar Pedro Infante antes de llegar al crucero Del Valle, se exhibió como el grupo de policías que realizaban el alcoholímetro no contaban con un médico, ni con representantes de la sociedad.

Yovanna Álvarez