Culiacán, Sinaloa. El día de ayer, el Gobernador del Estado, Quirino Ordaz Coppel, se erigió como defensor de corruptos al asegurar que no había delitos qué perseguir contra Armando Villarreal, quien fuera titular de la Secretaría de Administración y Finanzas en el gobierno anterior, declaró el presidente de la Federación de Abogados de Sinaloa (Fedasin), José Luis Polo Palafox.

En conferencia de prensa, el presidente de Fedasin mencionó que Ordaz Coppel dejó de lado su carácter de gobernador y se puso como defensor de posibles responsables, aun cuando la auditoría detectó irregularidades y se presentaron las denuncias correspondientes contra los ex funcionarios por el desvío de 293.5 millones de pesos, realizado durante el último semestre de 2016.

“Ayer el gobernador se equivocó porque no entendió que él fue elegido para gobernar Sinaloa y no para dictar sentencias, no es juez, no es magistrado y prácticamente ayer juzgó sin justificación jurídica alguna y, además, que es lo más lamentable, rebasando a un poder autónomo como es el Supremo Tribunal de Justicia y diciendo que no había delito”, dijo el presidente de Fedasin.

Aclaró que las declaraciones del gobernador seguramente se debieron a un mal asesoramiento y reconoció en Ordaz Coppel a un hombre bien calificado en el ejercicio de su poder.

 “La FEDASIN invita al gobernador a reivindicarse, a no minimizar latrocinios públicos y a que dé marcha atrás, que no haga ese acuerdo porque es un acuerdo brutal en contra de Sinaloa y de los sinaloenses, que no se debe permitir bajo ninguna circunstancia, porque daría el mensaje a los demás a que delincan, a que roben, a que todos hagan uso de recursos públicos”, declaró Polo Palafox.

Ángela Montoya