CIUDAD DE MÉXICO

Luego del choque entre migrantes y la Guardia Nacional ayer en la frontera sur de México y que dejó varios heridos, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que se debe garantizar la aplicación de la ley sin violar los derechos humanos, como sucedió ayer.

En su tradicional conferencia matutina, el mandatario destacó que entre las acciones que su administración ha llevado a cabo y que ha logrado es la salvaguarda de los derechos humanos de los indocumentados que buscan cruzar por nuestro país.

“Se procura que se aplique la ley sin violar derechos humanos, eso lo hemos logrado, incluso ayer. Necesitamos que se respeten nuestras leyes como lo hacen todos los países sin violar los DH y garantizar protección”, aseveró.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Migración (INAMI), en los hechos ocurridos ayer en la frontera de México con Guatemala, de los que responsabilizó a líderes de migrantes, fueron rescatadas 402 personas, mismas que fueron trasladadas a las instalaciones migratorias para atenderlas durante su estancia en territorio nacional; no obstante, autoridades buscan a 58 indocumentados que se adentraron por caminos no seguros de la zona sélvica.

López Obrador aseveró que además de garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes, su gobierno ofrece también protección y refugio, motivo por el cual, resaltó, es necesario tener un refugio de quienes ingresan al país.

Además, pese a las críticas de distintos sectores, así como de políticos, defendió la actuación de los elementos de la Guardia Nacional ayer.

“Nuestros adversarios, los conservadores, quisieran que se reprimiera, tener la foto; los que no decían nada antes y ahora están a la caza del gazapo: tener la foto de un Guardia Nacional golpeando a un niño migrante, pues no porque no somos iguales”, dijo.

Anunció que esta tarde el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, presentará un informe sobre la situación migratoria en la frontera entre México y Guatemala.

Enfrentamiento contra la GN

Los migrantes de la caravana de hondureños fueron frenados por elementos de la Guardia Nacional, a la altura del paso del coyote y el limón en la ribera del lado mexicano del río Suchiate, donde, al resistirse los migrantes, lanzaron piedras a los uniformados.

El saldo fue de al menos cinco elementos uniformados descalabrados, así como de varios migrantes lesionados. La situación se tornó tensa, pero luego volvió a la normalidad. Por la noche, la presencia de la Guardia Nacional fue reforzada y el cordón de seguridad entre el tramo del Paso del Coyote y el Limón continúa.

Los migrantes no se han resignado y pretenden insistir hoy martes en pasar a territorio mexicano. Mientras tanto, el puente fronterizo permanece cerrado a todo tipo de personas y vehículos, tanto del lado guatemalteco como mexicano, luego de la presencia de los integrantes de la caravana 2020.

Desde la madrugada de ayer lunes, los tres mil 500 migrantes decidieron caminar hacia el Puente Fronterizo Rodolfo Robles en Suchiate, Chiapas; ahí entregaron a las autoridades de Migración un documento dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador en el cual solicitaron libre tránsito por México, solicitud que fue rechazada.

La caravana pretendía ingresar a México por el puente Rodolfo Robles y con ello caminar por tierras mexicanas, situación que hasta el momento no se los permitieron. Durante la reyerta varios migrantes fueron asegurados y un grupo de por lo menos 200 personas logró huir hacia la carretera y a la altura de Frontera Hidalgo los interceptaron y encapsularon.

Personal del Instituto Nacional de Migración los obligó a subir a varios autobuses y posteriormente fueron trasladados a la Estación Migratoria Siglo XXI de la ciudad de Tapachula. La gran mayoría de los migrantes se quedó sobre la ribera del río, donde pasaron la noche.

Redacción