LAS VEGAS.

La afición mexicana ha sido injusta con Saúl Canelo Álvarez, considera Julio César Chávez, el mejor boxeador mexicano de todos los tiempos.

Álvarez podría llegar a cuatro títulos en divisiones diferentes, y superar, en ese renglón a Chávez, quien sólo consiguió tres.

"La afición mexicana ha sido muy injusta con el Canelo”, considera Chávez, quien está en Las Vegas para cumplir sus compromisos con medios de comunicación para la pelea en la que Canelo buscará arrebatarle el cinturón semicompleto de la Organización Mundial de Boxeo.

Su carrera ha sido impecable, y sí hay muchos mexicanos que se lo reconocen, sobre todo los de aquí de Estados Unidos, pero en México muchos lo desprecian”.

"Cuando yo peleaba, me podrían criticar que no me preparé bien, que no le eché ganas, pero a nadie, ningún mexicano, recuerdo que quisiera que yo perdiera. Ni conmigo ni con nadie recuerdo algo así”.

Chávez no entiende el por qué la falta de apoyo de los mexicanos hacia el peleador tapatío, pero conoce una posible solución para que lo acepten.

"Quizás necesita una guerra. De esas donde hay sangre, un nocaut espectacular y quizás así la gente lo termine por aceptar; porque méritos deportivos, de números, de estadísticas, los tiene todos”, señaló la leyenda del boxeo mexicano.

Chávez rechazó hablar de la suspensión que le impuso la Comisión Atlética de Nevada a su hijo por supuestamente rechazar someterse a una prueba antidopajes.

"No quiero hablar de eso. Yo ya sólo estoy para apoyarlo, para aconsejarlo, como un padre, pero nada más”.

JC Chávez no ha sido olvidado por los aficionados mexicanos y ayer se comprobó una vez más en Las Vegas. Al momento que se realizaba el pesaje, subió a un escenario alterno y la gente comenzó a corear su nombre.

Excélsior