Quito, Ecuador, a lunes 30 de junio de 2025.- Un tribunal de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador condenó este lunes a 13 años de cárcel e inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos al exvicepresidente Jorge Glas por malversación de fondos públicos.
Glas malversó dichos fondos durante el proceso de reconstrucción de las zonas más afectadas por el terremoto de magnitud 7,8 que sacudió la costa ecuatoriana en abril de 2016 y dejó cientos de víctimas fatales.
Junto a Glas, también recibió los mismos años de prisión Carlos Bernal, exsecretario técnico del Comité de Reconstrucción de Manabí, creado con el objetivo de implementar las obras de mayor urgencia para socorrer a la población duramente golpeada por el sismo.
La sentencia judicial determinó que Glas y Bernal utilizaron sus cargos como presidente y secretario del Comité para "abusar de dineros públicos" que debían utilizarse para atender a las víctimas en el caso denominado Reconstrucción de Manabí.
La jueza Mercedes Caicedo, quien leyó la sentencia, indicó que los recursos recaudados de los ecuatorianos —a través de impuestos y contribuciones— para la reconstrucción, se destinaron a la creación de "construcciones inservibles, inutilizadas e innecesarias bajo el nulo respeto a la Ley de Solidaridad, pero sobre todo, bajo el nulo respeto a las víctimas del terremoto".
La captura de Glas en abril de 2024 provocó un conflicto diplomático entre Ecuador y México.
El quiebre se produjo luego que Glas solicitara asilo en la embajada mexicana en Quito y un grupo de policías ecuatorianos irrumpiera en la sede diplomática para capturarlo.
Tras el asalto, el entonces presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ordenó la suspensión de las relaciones diplomáticas con Ecuador. "Se trata de una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México", aseguró el mandatario.
El embajador encargado de México en Ecuador, Roberto Canseco, se hallaba en la sede diplomática cuando comenzó el operativo policial y confrontó a los agentes.
"A riesgo de mi vida defendí el honor y soberanía de mi país", le dijo a la prensa.
El gobierno ecuatoriano liderado por Daniel Noboa acusó a la embajada mexicana de haber "abusado de las inmunidades y privilegios" y denunció que el asilo diplomático concedido a Glas era "contrario al marco jurídico convencional".
"Ecuador es un país soberano y no vamos a permitir que ningún delincuente quede en la impunidad", señaló en un comunicado.
El operativo en la embajada mexicana en Quito provocó una amplia reacción de rechazo por parte de los gobiernos de América Latina y de organizaciones internacionales por considerarlo una violación de los instrumentos internacionales que regulan las relaciones diplomáticas y el derecho al asilo. (BBC Mundo).