Durante una manifestación del pasado viernes agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) fueron señalados de abuso de fuerza durante un operativo de redada migrante en Los Ángeles. De acuerdo con reportes locales, los vecinos salieron a las calles para detener a los elementos migratorios y evitar mayor número de detenciones, lo que derivó en fuertes movilizaciones en las calles angelinas.
Defensores de derechos humanos y activistas han denunciado, a través de redes sociales, sobre los operativos migratorios ejecutados en zonas céntricas de Los Ángeles, por lo que la comunidad hispana se ha mantenido en alerta a través de mensajes de texto y advertencias en plataformas digitales.