Culiacán, Sinaloa. Los militares que fallecieron en el desplome de un helicóptero en la sierra de Durango fueron trasladados a Sinaloa para que sea la Fiscalía General del Estado la que se encargue de la necropsia de ley, informó el gobernador Rubén Rocha Moya.

“Tengo la información que murieron tres tripulantes; el piloto, copiloto y uno más. Se pidieron que los trasladaran aquí para que la Fiscalía Estatal les haga la necropsia y se les está apoyando en eso”, dijo.

El mandatario estatal aclaró que se trató de un accidente aéreo y no de un enfrentamiento como en un principio trascendió.

Quienes perdieron la vida fueron dos pilotos y un elemento que los acompañaba, todos con grado militar. Identificados como el capitán segundo Mario Joel Rangel Soto; el teniente Alfonso Aguilar Medina y el sargento segundo Jerson Manuel Morales Román.

Enrique Rodríguez