Rays e Isaac Paredes derriban el Bronx; le ganan a Yankees 5-1 Destacado

Escrito por  Excélsior Ago 01, 2023

 

El sonorense llegó a 21 cuadrangulares en la temporada para imponer una marca personal en MLB.

 

No hace mucho tiempo, para ser concretos en abril de 2022, los Tigres de Detroit pensaron que habían hecho un gran negocio al enviar a los Rays de Tampa Bay al mexicano Isaac Paredes a cambio del jardinero Austin Meadows, quien en 2019 se consagró con una campaña de 33 cuadrangulares.

El tiempo y sobre todo las habilidades de Paredes para batear han hecho que la negociación sea uno de los más grandes fracasos de la actual gerencia de Detroit.

Anoche en Yankee Stadium, el infielder sonorense se voló la barda en el cuarto episodio del encuentro contra los neoyorquinos. No fue un jonrón cualquiera para Isaac Paredes. El de ayer representó el bambinazo 21 que pega el infielder en la campaña para superar su marca personal de 20 que impuso el año pasado. El nativo de Hermosillo se ha convertido en una de las bujías más potentes de la ofensiva de los Rays al liderar el departamento de vuelacercas que en conjunto suman 159.

El palo de cuatro esquinas de Paredes fue el cuarto de la noche contra el pitcheo de los Yankees. La novena de la gran manzana originalmente planeó abrir con Domingo Germán, pero fue descartado por dolencias en su axila por lo que llamaron a Jhony Brito de la sucursal Triple-A.

Finalmente Brito cargó con la derrota al aceptar las cinco carreras en cuatro innings de labor. Germán ingresó en el quinto capítulo y aunque no aceptó daño, los Yankees no tuvieron la capacidad para levantar un vuelo que va en picada.

Tyler Glasnow, quien lidera a todos los lanzadores de la Liga Americana con 96 ponches desde el 27 de mayo, continuó con su performance al sostenerse en el montículo siete innings en los que apenas toleró tres imparables y una carrera. Abanicó a ocho enemigos.

Su único pecado fue un cuadrangular de Jake Bauers en el segundo inning.

A lo largo de la campaña, 25 pitchers han lanzado siete o más entradas contra los Yankees, la mayor cantidad para cualquier equipo de Grandes Ligas y una estadística que describe que el equipo neoyorquino ha dejado de ser los Bronx Bombers.