El Newcastle derrotó 2-0 en casa al Manchester United y arrebató a su rival de este domingo en la 29ª jornada de la Premier League el tercer puesto en la clasificación, dando un paso importante así en la carrera por estar en la próxima Champions League.

Los dos equipos están ahora igualados a 50 puntos, pero el Newcastle tiene una diferencia de goles claramente favorable (+22 contra +4).

El Tottenham, quinto con un punto menos pero un partido disputado más, se desplaza el lunes al campo del Everton (18º). Podría por lo tanto alcanzar o superar a Newcastle y Manchester United en la tabla, pero después de esa visita a Goodison Park tendrá dos partidos jugados más que esos dos equipos.

La lucha por la Champions está por lo tanto muy emocionante en Inglaterra y el Newcastle era consciente de que ganar este domingo era muy importante y que suponía además una bonita revancha por la final perdida a finales de febrero ante el United por 2-0 en la Copa de la Liga inglesa.

Las mejores ocasiones fueron desde el principio para las 'Urracas', ante un público entregado en su templo de St James' Park.

En el minuto 17, el arquero español David De Gea tuvo que realizar una gran doble atajada antes sendos intentos de Alexander Isak y Joe Willock. Sean Longstaff (39) y Willock (41) enviaron luego sus disparos fuera por muy poco.

Fue a la hora de juego cuando el Newcastle pudo por fin abrir el marcador, tras una bella acción colectiva: un centro de Joelinton fue tocado de cabeza por Saint-Maximin, a modo de asistencia para que Willock, situado cerca de la línea, rematara de cabeza a puerta vacía (1-0, 65).

De Gea siguió estando muy atareado. En el 76 desvió al larguero un balón rematado de cabeza por Joelinton en un saque de esquina, pero a tres minutos para el final del tiempo reglamentario, Callum Wilson sentenció, poniendo de cabeza el 2-0 (88).

El Manchester United dio una mala imagen en esta ocasión, algo preocupante en el inicio de un abril crucial, en el que afrontará además de la Premier League las semifinales de la Copa de Inglaterra, ante el Brighton, y los cuartos de final de la Europa League, contra el Sevilla.