Una tremenda pelea, de las que sugieren verla una y otra vez, sacudió el Cleveland Cavaliers - Memphis Grizzlies de anoche, con claro triunfo para los ‘Cavs’ (128-113). Los protagonistas, Donovan Mitchell y Dillon Brooks. Y con ‘métodos’ poco habituales.

Como dice el dicho, dos no se pelean si uno no quiere, pero fue el jugador de Memphis el que empezó. El partido se encontraba en el ecuador del tercer cuarto con 81-76 para Cleveland cuando Brooks, tras no poder anotar en una acción en la que le defendía ‘Spida’, se fue al suelo. Lo insólito empezó cuando el alero de los Grizzlies hizo caer al escolta de los Cavs tras agarrarle…de los testículos.

Mitchell se fue instantáneamente al suelo y reaccionó soltando un balonazo a Brooks. A partir de aquí, se lio la ‘mundial’ con miembros de ambos equipos teniendo que intervenir urgentemente para que el asunto no pasara a mayores, formándose una ‘melé’ de las buenas.

Los dos jugadores fueron automáticamente expulsados con una flagrante 2. Pero la trifulca siguió luego en el post partido. Habló ‘Spida’, quien no pudo ser más contundente: “Él y yo hemos tenido nuestras batallas personales durante años. Siendo bastante franco, le he estado rompiendo el cuelo durante años, play-offs y temporadas regulares”, soltó Donovan Mitchell, quien tuvo un partido horrendo con apenas 6 puntos en 22 minutos, con un 2/11 en tiros.

"Fue una jugada sucia, Donovan se mantuvo firme", afirmó Ricky Rubio.

“Al final del día hubo una pelea. No es un buen ejemplo para los niños, seguro”, dijo, por su parte, Ricky Rubio en declaraciones recogidas por Kelsey Russo. “Pienso que fue una jugada sucia y que Donovan se mantuvo firme, yo le apoyé”, dijo también el base catalán, que mantuvo un intenso duelo español en la cancha con Santi Aldama, con una actuación brillante para ambos.