Al cierre de marzo pasado, los trabajadores que ganaban de uno a dos salarios mínimos (6 mil 160 pesos al mes) sumaron 27.8 millones de empleados, cifra 16.3% superior a la registrada en el mismo periodo del año anterior, representando más de la mitad (51.3%) de la población total ocupada en el país.
Con datos ajustados por estacionalidad, la tasa de desocupación fue de 3.46% de la
“Esto se debe a que ha habido varios recortes en diferentes dependencias gubernamentales, adicionales a los ajustes en el sector privado en ciertas áreas, lo que ha permitido que la tasa de desocupación vaya en aumento, y que esto afecte a ciertos indicadores laborales, como la tasa de condiciones críticas de ocupación”, comentó Héctor Magaña, profesor e investigador.
Las entidades que durante los primeros tres meses del año observaron las tasas de desocupación más altas fueron: Tabasco, con 7.4%; Ciudad de México, 5.1%; Durango, 4.6%; Sonora, 4.5%; Estado de México, 4.4%; Coahuila, 4.2%; Sonora, 4.2%, y Nayarit, 4.1% de la PEA, con base en cifras ajustadas por estacionalidad.
Con cifras desestacionalizadas, la tasa de informalidad laboral se ubicó en 56.9% de la población ocupada, cifra 0.3 puntos porcentuales mayor en el primer trimestre del año en curso con relación al trimestre inmediato anterior.