Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez renunció a su cargo como fiscal de Nuevo León en medio de la polémica y tras la cuestionable actuación de la dependencia a su cargo en el caso de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa.

El fiscal presentó un escrito en la Oficialía de Partes del Congreso del estado en el cual señala que somete a su consideración la renuncia al cargo que ostenta desde el 9 de marzo del 2018 y argumenta que la decisión es por su proceso de jubilación tras más de 40 años en el servicio público.

En la misivia, Guerrero Gutiérrez aseguró que en su cargo como fiscal dio lo mejor de sí para buscar resolver las problemáticas que aquejan a la población del estado.

“Puedo decir que mantuvimos la ruta y permanecimos de pie a pesar de la violencia generada por la delincuencia, los obstáculos propios de la estrechez financiera y las consecuencia de una pandemia global”, indicó en la misiva.

Aseguró que bajo su gestión se puso en marcha la primera fiscalía “totalmente autónoma en el país" y se consolidó un nuevo modelo de investigación.

Agregó que toca “abrir la puerta a nuevos retos profesionales” y reiteró que se va con la satisfacción del deber cumplido.

Trascendió que en el cargo será nombrado Pedro Arce, vicefiscal jurídico, quien quedará como encargado mientras que el Congreso realiza el proceso para designar a un nuevo titular del órgano autónomo.

¿Quién es Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez?

Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez es licenciado en Ciencias Jurídicas por la Universidad Autónoma de Nuevo León.

Su carrera en el servicio público inició en 1980 y ha desempeñado diversos cargos. Desde 1999 a 2018 fue magistrado del Tribunal Superior de Justicia y en los periodos de 2001-2003, 2007-2009, 2013-2015, fungió como su presidente.