Gas más costoso, escasez de cereales y los altos precios de los alimentos, son de los principales efectos –seis meses después–, de que Rusia iniciara su invasión a Ucrania; la crisis bélica sumió a 80 millones de personas en el mundo en la pobreza extrema.
El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo que el medio año de la incursión rusa representa un "hito triste y trágico" y denunció las secuelas de esta "guerra absurda" que van "más allá de Ucrania".
El Programa de Desarrollo de Naciones Unidas informó que el aumento de los precios de los alimentos y la energía hundió a 80 millones de personas en todo el mundo en la pobreza en los primeros tres meses de la guerra. Los países de los Balcanes y África subsahariana, los más afectados.
El precio del gas natural superó los 300 euros (5 mil 957.43 pesos), el equivalente de megavatio hora (MWh), un nivel al que no se llegaba desde el récord histórico registrado a principios de marzo (345 euros), al inicio de la invasión rusa.
Los europeos se preparan para un invierno difícil por la escasez de gas procedente de Rusia, cuya guerra ha puesto en las nubes el mercado energético mundial.
Los inviernos fríos ayudaron a Moscú a derrotar a Napoleón y a Hitler y, ahora, el presidente Vladimir Putin apuesta a que los precios de la energía se eleven y a una posible escasez de gas persuadan a Europa de que Ucrania debe ser obligada a una tregua... bajo las condiciones de Rusia.
También, los costos del trigo se dispararon hasta los cerca de 440 euros (8 mil 742.23 pesos) la tonelada en el mercado, el doble que un verano antes, mientras el tráfico mercante estaba prácticamente paralizado en el mar Muerto.
Ucrania es una superpotencia agrícola que junto con Rusia supuso 30% del comercio mundial de trigo a finales de 2021.
La información recopilada, entre abril y julio de 2022, señala que 92.9% de los países de ingreso bajo, 92.7% de percepción mediana baja y 89% de los de ingreso mediano alto, han registrado niveles de inflación superiores a 5%.
Los ucranianos han pagado un costo humano muy alto: cinco mil 587 civiles han muerto y otros siete mil 890 han resultado heridos, en su mayoría, por ataques de artillería y misiles, según datos de la ONU.
Más de 11 millones de ucranianos han abandonado sus hogares y más de cinco millones han optado por cruzar la frontera.
El presidente Volodímir Zelenski, en el marco del 31 aniversario de la independencia ucraniana, dijo en video ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que "el futuro del mundo se está decidiendo en Ucrania" y avisó que si Rusia gana, llevará la guerra a otros países.
Más tarde, al menos 22 muertos dejó un bombardeo contra una estación de ferrocarril en Cnipropetrovsk, en el centro de Ucrania, cumpliendo las advertencias que había adelantado EU sobre posibles nuevas ofensivas rusas.