Rafael Caro Quintero obtuvo la suspensión para evitar ser extraditado a Estados Unidos, donde es requerido por el asesinato del agente de la DEA, Enrique Kiki Camarena, en 1985, por lo que debe enfrentar primero su proceso en México.
Más temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que las autoridades correspondientes serían las que deberían tomar la decisión de entregar o no al narcotraficante al gobierno estadunidense.
Además, en su conferencia en Palacio Nacional informó que la defensa de Rafael Caro Quintero promovió una serie de amparos por para ser liberado.
El mandatario informó que tras la detención del capo, la defensa de éste tramitó diversos recursos legales en contra de su detención el pasado viernes
“Estos primeros amparos no van en contra de la extradición, sino para que se le libere esgrimiendo de que hubo errores en el procedimiento, entonces la autoridad va a contestar cómo fue que se lle´vo a cabo el procedimiento legal, que, entiendo, fue de acuerdo con el procedimiento establecido", aseguró.