Nacen 290 ballenas grises en santuario de Baja California Destacado

Escrito por  May 22, 2022

Son mamíferos mexicanos

Mulegé, Baja California Sur. La respiración de una ballena gris (Eschrichtius robustus) es tan espectacular que permite encontrarla aún a la distancia, y es por medio de cada soplo que los guardaparques pueden contarlas una a una, para estimar su población y determinar si se trata de un ejemplar adulto o un ballenato. Cada invierno, cientos de ballenas grises recorren más de 9 mil kilómetros desde el Mar de Bering en Alaska hasta el complejo lagunar Ojo de Liebre en Baja California Sur.

Una parte del grupo migra con el firme propósito de aparearse, mientras que otras hembras vienen preñadas y llegan hasta estas cálidas aguas para parir y cuidar de sus crías. Es el Santuario de Ballenas "El Vizcaíno", también conformado por la laguna costera San Ignacio, ambas ubicadas en la reserva de la biosfera del mismo nombre.

“Son ballenas mexicanas que nacen en México y se reproducen en México; toman mucha energía y se van en esta larga migración de regreso a las áreas de alimentación”, señaló Everardo Mariano Melendez, director de la Reserva de la Biosfera "El Vizcaíno", sitios que forma parte de la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, en la categoría Bien Natural. 

Cada temporada, los guardaparques de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) realizan nueve censos de ballena para conocer las tendencias de su migración. Este año, reportaron la presencia máxima de 948 ballenas, esto fue durante el quinto conteo que realizaron el pasado 14 de febrero dentro de la temporada 2021-2022.

De ellas, 271 ejemplares migraron solas para aparearse; mientras que 290 madres llegaron a parir a igual número de ballenatos. “Los censos y recorridos de vigilancia muestran que la mamá interactúa con el ballenato y le muestra cómo respirar durante dos o tres meses y después migra hacia el norte”, señaló el biólogo Noé López Paz. Contar los soplos Para realizar el censo, los guardaparques recorren la laguna a bordo de dos lanchas durante cinco horas continuas, desde donde observan y cuentan cada soplo, es decir, las columnas de vapor de agua que las ballenas expulsan cada vez que emergen para respirar por los espiráculos –orificios nasales– que se encuentran en su lomo.

El recorrido se hace en colaboración con la empresa paraestatal Exportadora de Sal de Guerrero Negro, que dispone de una panga al equipo de la Conanp; a las 9:00 horas parten del muelle de Puerto Chaparrito, en terrenos de la salina más grande del mundo. "Van dos observadores, uno a la derecha y uno a la izquierda, el anotador y el motorista, lo que vamos haciendo es observando qué ballena es, si lo ves a simple vista se ve la mamá y la cría, pero si está muy alejada es un soplo grande y uno pequeño, y nosotros con los binoculares, certificamos qué en verdad es", explica Gabriel Zaragoza Aguilar, guardaparques que desde hace 25 años participa en el conteo de ballenas que realiza la Conanp. Los cuatro tripulantes realizan su misión a conciencia, concentrados en observar los soplos en el horizonte, pero en ocasiones pueden ver a estos gigantes por completo y saber qué están haciendo. (Milenio).

Modificado por última vez en Domingo, 22 Mayo 2022 07:34
Humberto

Corresponsal en Vivavoz
Trabajó como journalist en 1150 AM Denver
Trabajó como journalist en El Universal El Gran Diario de Mexico
Trabajó como journalist en El Heraldo de México
De Ciudad de México