Luego de la segunda ola de contagios de Covid-19 ocurrida en Sinaloa en los meses de enero y febrero, se esperaba que se estabilizara la incidencia de contagios y muertes por Covid en nuestro estado… pero no ha sido así.

Si bien es cierto que la cifra diaria de contagios bajó considerablemente de acuerdo a las estadísticas oficiales dadas a conocer cada noche por la Secretaría de Salud, cierto es también que no está ocurriendo lo mismo con el número de muertes de personas a causa de esta enfermedad.

En ese entendido, algo raro está pasando. Es hasta cierto punto incongruente, pues, que por un lado bajen los contagios, pero por el otro, suba la cifra de defunciones. La lógica nos lleva a pensar que a menor número de personas contagiadas, menor debe ser también la cifra de estos pacientes que no logran vencer al coronavirus.

Por sólo citar un caso: el 30 de enero, día con más pacientes enfermos con 1102, se reportaron 12 nuevas defunciones. En cambio, el pasado 7 de abril, el día con menos pacientes enfermos con apenas 307 personas contagiadas, se reportaron 15 nuevos fallecimientos.

Esto marca una tendencia transversalmente opuesta entre los dos indicadores, los más importantes para darnos una idea de qué tan grave es la situación actual de la pandemia.

Esperamos que no ocurra como ya ha sucedido al menos en dos ocasiones, que el día menos pensado, las autoridades saquen a relucir una considerable cantidad de casos de muertes y contagios que no se habían reportado quién sabe por qué razones.