Culiacán, Sinaloa. Una corona, flores y veladoras están colocadas sobre el sepulcro de doña Manuela, apenas fallecida hace un mes y que hoy, aún con la pena encima, su nuera doña Luisa se da a la tarea de mantenerlo limpiecito y adornado, en donde yacen sus restos en la cripta familiar del Panteón Civil.

Vecina de la colonia Pemex, la señora Luisa es una de las tantas personas que siempre llevarán en su corazón a sus seres queridos que ya fallecieron, cuyos restos se encuentran en algunos de los sepulcros de los cementerios de salud.

Y así como algunas otras personas, doña Luisa decidió aprovechar los días previos al Día de Muertos para recorrer y limpiar las dos tumbas de la familia; una en el Panteón Civil, y la otra en el Jardín Guadalupano del sector Barrancos, donde tiene a uno de sus nietos que se adelantó en el camino sin regreso, una tarea que la hace revivir los momentos que pasó con cada uno de ellos.

“Tiene apenas un mes que falleció. Para mi era una madre. Cada hijo que iba yo a parir, ella era la que me llevaba al Seguro. Siempre estaba al pendiente de mí. Y cuando yo estaba malita siempre iba a mi casa a echarme la mano, a limpiar, a hacerme comida. Son recuerdos bonitos que se quedan para siempre en nuestro corazón”, comentó doña Luisa, mientras terminaba de barrer las hojas secas que se acumularon junto a la tumba donde están además los restos de un hijo, su suegro y una cuñada.

Enrique Rodríguez