Muere a los 111 años el artista español Luis Torras, considerado el pintor más longevo del mundo Destacado

Escrito por  QuintoPoder Ene 16, 2024

 

Galicia, Vigo (España).- El artista, caracterizado por su fuerte personalidad y dedicación incansable al trabajo, continuó pintando hasta hace apenas un año, cuando ya no pudo subir a su estudio

 

El pasado domingo, el reconocido pintor español Luis Torras cerró su última obra en la tranquilidad de su hogar, dejando atrás 111 años de una vida dedicada al arte. Considerado el hombre más longevo de Galicia y de España, Torras compartió 77 años de matrimonio con su compañera, María Jesús Incera, quien falleció este verano a una edad centenaria.

El artista, caracterizado por su fuerte personalidad y dedicación incansable al trabajo, continuó pintando hasta hace apenas un año, cuando ya no pudo subir a su estudio. Siempre afirmó que dejar de pintar significaría perder el sentido de vivir.

Hace un año y 16 días, Luis Torras se convirtió oficialmente en la persona más longeva de Galicia y el hombre más longevo de Europa. Con humor, admitió desconocer el secreto de su longevidad, destacando que llevaba una vida normal y no seguía ningún régimen especial. A pesar de los años, seguía funcionando y maravillándose de su propia resistencia.

Aunque no era amante de las celebraciones, Luis Torras fue un maestro en su arte y un referente en la escena artística gallega. Sus contribuciones como profesor en la Escuela de Artes y Oficios durante 50 años dejaron una huella imborrable en artistas como Silverio Rivas, Mingos Teixeira y otros. Su legado artístico puede apreciarse en la Casa das Artes, donde donó una colección de 50 cuadros al Concello en 1998, con la intención de ampliarla con 30 obras de calidad en el futuro.

El hombre que nació en Alfonso XIII el 29 de diciembre de 1912, inició su camino artístico desde niño, asistiendo a clases con el profesor Viralles en Vigo y continuando su formación en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando en Madrid. Su sordera permanente, resultado de ser herido en el frente norte durante la Guerra Civil, no detuvo su pasión por la pintura ni su influencia en generaciones de artistas vigueses.

Los actos funerarios se llevarán a cabo conforme a su deseo, en la más estricta intimidad, sin duelo ni funeral oficial. La ciudad de Vigo y la escena artística gallega despiden a un hombre que dejó un legado perdurable, no solo en sus obras sino también en la inspiración y enseñanzas que compartió a lo largo de su prolífica vida.